¡Está de suerte!
Le apetece salir a comer con la familia, pero como tiene niños pequeños, puede que le asuste la idea de comer en un restaurante.
La tentación de confiar en las pantallas para entretener a los niños en los restaurantes es comprensible. Sin duda habrá visto a un niño pegado a su teléfono o tableta mientras los adultos de la mesa disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada.
Puede que hayas pensado: "Yo nunca haría eso". O quizá más bien: "Tiene una pinta estupenda", mientras limpias con nostalgia una bebida derramada.
Pero "cenar o comer sin móvil ni tableta" tiene muchas ventajas, desde oportunidades para estrechar lazos familiares y mejorar la conversación hasta simplemente enseñar a tus hijos importantes habilidades sociales.
¿Qué va a hacer? ¿Dejar que jueguen con sus teléfonos o tabletas mientras los adultos disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada? ¿O cederás a la tentación y dejarás que jueguen con sus teléfonos o tabletas mientras los adultos disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada?
Aquí tienes algunos consejos para disfrutar de una cena en un restaurante sin pantallas.
Investiga en el restaurante
La comida para bebés y las tronas son dos cosas importantes a tener en cuenta a la hora de elegir un restaurante.
Si vas a salir a comer con tu familia, es importante tener en cuenta las necesidades específicas de cada miembro del grupo.
Investiga con antelación y llama para comprobar si el restaurante dispone de tronas en caso de que las vayas a necesitar (y, por defecto, averigua si el local elegido admite comensales pequeños).
Explore las opciones de menú y lleve comida para bebés o tentempiés para los más pequeños si los necesitan.
Para evitar esperas con niños hambrientos, déles de comer antes de salir o planee pedir un aperitivo enseguida.
Por último, asegúrese de que haya cerca una zona de juegos con juguetes y libros para mantenerlos entretenidos mientras esperan la comida.
¿Visitas un restaurante con niños sin móvil ni tableta?
Lleve provisiones adecuadas para los niños
Bebés
Cuando sales con tu pequeño, a veces es difícil encontrar un lugar que también esté dispuesto a atenderle. Los restaurantes no suelen estar equipados para bebés y niños pequeños, e incluso cuando lo están, pueden resultar complicados.
Es importante recordar que tu bebé o niño pequeño experimenta muchos cambios a medida que crece, ¡y lo mismo ocurre en los restaurantes!
Los vasos a prueba de salpicaduras y los utensilios adecuados garantizan el éxito de tu bebé o niño pequeño en el restaurante.
Para los niños que vuelcan los platos, puede ser útil un salvamanteles que se adhiera a la mesa. Este salvamanteles es fácil de limpiar al final de la comida y se puede enrollar para guardarlo en una bolsa.
Lleve algunos juguetes para la dentición o táctiles que puedan engancharse a la muñeca del niño, a la ropa o al asa del portabebés, para no tener que arrastrarse por el suelo lleno de comida para recoger los objetos que se caigan.
Para los niños que usan trona, un juguete atractivo que se adhiera a la mesa es una buena opción.
Preescolares
Los niños en edad preescolar pueden ser un poco alocados cuando comen, pero si tienen algo que hacer, se mantendrán concentrados.
Un pequeño juego de construcción con cerraduras o bloques de construcción magnéticos es la elección perfecta para los preescolares en la mesa.
Si das a las manitas algo que hacer, les disuadirás de alternativas como las sinfonías de cubiertos o hacer nieve con sal.
No te preocupes: no hace falta que compres un juego entero de juguetes de construcción. Basta con una o dos piezas.
Niños mayores
Los niños mayores siempre buscan nuevas formas de expresarse, y con estos divertidos materiales artísticos pueden hacerlo sin tener que ensuciarse las manos.
En primer lugar, ten en cuenta los productos que permiten a los niños mayores dibujar o pintar sin ensuciarse las manos.
Estos productos son estupendos porque brindan a los niños mayores la oportunidad de crear arte sin ensuciarse las manos. También son estupendos para iniciar a los más pequeños en la magia del dibujo y la pintura sin tener que preocuparse de ensuciarse las manos.
Otra opción es incluir varios recipientes pequeños con cuentas para ensartar. Así, los niños mayores podrán explorar la geometría y la teoría del color mientras crean algo bonito.
¿Visitas un restaurante con niños sin móvil ni tableta?
Haz que la espera sea divertida
Cuando salgas a comer fuera, ¡haz que la espera sea divertida!
Ya sea en un restaurante o en el supermercado, es útil introducir algunos juegos de espera.
Empieza preguntando a cada comensal: "¿Qué es lo que más te ha gustado hoy?".
Luego sigue con una pregunta: "¿Qué es lo que más te apetece que llegue mañana?".
También puedes probar un juego de espera que consista en hacer muecas o ruidos graciosos hasta que llegue el turno de pedir.
Las posibilidades son infinitas, pero recuerda que el objetivo es mantener a todo el mundo entretenido y participativo mientras esperáis la comida.
Después de comer
Después de una buena comida, es tentador quedarse en la mesa charlando con los niños.
Sin embargo, si quieres que la diversión continúe después de que todos hayan comido, planea un paseo o trasládate a otro lugar o simplemente vuelve a casa con la promesa de que volveréis a comer pronto.
Salir a comer con los niños es factible (al fin y al cabo, seguro que tus padres han sobrevivido a este tipo de salidas contigo) y todos los implicados pueden salir saciados... ¡e indemnes!
Las ocasionales noches infames llenas de comida derramada, pedidos chapuceros y suspiros airados de otros comensales que parecen no recordar la vida con niños pequeños se repetirán a pesar de todo.
Pero puede estar seguro de que, con un poco de preparación previa y algunos trucos bajo la manga, será usted quien se deleite con los cumplidos de los demás comensales.
Le apetece salir a comer con la familia, pero como tiene niños pequeños, puede que le asuste la idea de comer en un restaurante.
La tentación de confiar en las pantallas para entretener a los niños en los restaurantes es comprensible. Sin duda habrá visto a un niño pegado a su teléfono o tableta mientras los adultos de la mesa disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada.
Puede que hayas pensado: "Yo nunca haría eso". O quizá más bien: "Tiene una pinta estupenda", mientras limpias con nostalgia una bebida derramada.
Pero "cenar o comer sin móvil ni tableta" tiene muchas ventajas, desde oportunidades para estrechar lazos familiares y mejorar la conversación hasta simplemente enseñar a tus hijos importantes habilidades sociales.
¿Qué va a hacer? ¿Dejar que jueguen con sus teléfonos o tabletas mientras los adultos disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada? ¿O cederás a la tentación y dejarás que jueguen con sus teléfonos o tabletas mientras los adultos disfrutan del aperitivo y de una conversación civilizada?
Aquí tienes algunos consejos para disfrutar de una cena en un restaurante sin pantallas.
Investiga en el restaurante
La comida para bebés y las tronas son dos cosas importantes a tener en cuenta a la hora de elegir un restaurante.
Si vas a salir a comer con tu familia, es importante tener en cuenta las necesidades específicas de cada miembro del grupo.
Investiga con antelación y llama para comprobar si el restaurante dispone de tronas en caso de que las vayas a necesitar (y, por defecto, averigua si el local elegido admite comensales pequeños).
Explore las opciones de menú y lleve comida para bebés o tentempiés para los más pequeños si los necesitan.
Para evitar esperas con niños hambrientos, déles de comer antes de salir o planee pedir un aperitivo enseguida.
Por último, asegúrese de que haya cerca una zona de juegos con juguetes y libros para mantenerlos entretenidos mientras esperan la comida.
¿Visitas un restaurante con niños sin móvil ni tableta?
Lleve provisiones adecuadas para los niños
Bebés
Cuando sales con tu pequeño, a veces es difícil encontrar un lugar que también esté dispuesto a atenderle. Los restaurantes no suelen estar equipados para bebés y niños pequeños, e incluso cuando lo están, pueden resultar complicados.
Es importante recordar que tu bebé o niño pequeño experimenta muchos cambios a medida que crece, ¡y lo mismo ocurre en los restaurantes!
Los vasos a prueba de salpicaduras y los utensilios adecuados garantizan el éxito de tu bebé o niño pequeño en el restaurante.
Para los niños que vuelcan los platos, puede ser útil un salvamanteles que se adhiera a la mesa. Este salvamanteles es fácil de limpiar al final de la comida y se puede enrollar para guardarlo en una bolsa.
Lleve algunos juguetes para la dentición o táctiles que puedan engancharse a la muñeca del niño, a la ropa o al asa del portabebés, para no tener que arrastrarse por el suelo lleno de comida para recoger los objetos que se caigan.
Para los niños que usan trona, un juguete atractivo que se adhiera a la mesa es una buena opción.
Preescolares
Los niños en edad preescolar pueden ser un poco alocados cuando comen, pero si tienen algo que hacer, se mantendrán concentrados.
Un pequeño juego de construcción con cerraduras o bloques de construcción magnéticos es la elección perfecta para los preescolares en la mesa.
Si das a las manitas algo que hacer, les disuadirás de alternativas como las sinfonías de cubiertos o hacer nieve con sal.
No te preocupes: no hace falta que compres un juego entero de juguetes de construcción. Basta con una o dos piezas.
Niños mayores
Los niños mayores siempre buscan nuevas formas de expresarse, y con estos divertidos materiales artísticos pueden hacerlo sin tener que ensuciarse las manos.
En primer lugar, ten en cuenta los productos que permiten a los niños mayores dibujar o pintar sin ensuciarse las manos.
Estos productos son estupendos porque brindan a los niños mayores la oportunidad de crear arte sin ensuciarse las manos. También son estupendos para iniciar a los más pequeños en la magia del dibujo y la pintura sin tener que preocuparse de ensuciarse las manos.
Otra opción es incluir varios recipientes pequeños con cuentas para ensartar. Así, los niños mayores podrán explorar la geometría y la teoría del color mientras crean algo bonito.
¿Visitas un restaurante con niños sin móvil ni tableta?
Haz que la espera sea divertida
Cuando salgas a comer fuera, ¡haz que la espera sea divertida!
Ya sea en un restaurante o en el supermercado, es útil introducir algunos juegos de espera.
Empieza preguntando a cada comensal: "¿Qué es lo que más te ha gustado hoy?".
Luego sigue con una pregunta: "¿Qué es lo que más te apetece que llegue mañana?".
También puedes probar un juego de espera que consista en hacer muecas o ruidos graciosos hasta que llegue el turno de pedir.
Las posibilidades son infinitas, pero recuerda que el objetivo es mantener a todo el mundo entretenido y participativo mientras esperáis la comida.
Después de comer
Después de una buena comida, es tentador quedarse en la mesa charlando con los niños.
Sin embargo, si quieres que la diversión continúe después de que todos hayan comido, planea un paseo o trasládate a otro lugar o simplemente vuelve a casa con la promesa de que volveréis a comer pronto.
Salir a comer con los niños es factible (al fin y al cabo, seguro que tus padres han sobrevivido a este tipo de salidas contigo) y todos los implicados pueden salir saciados... ¡e indemnes!
Las ocasionales noches infames llenas de comida derramada, pedidos chapuceros y suspiros airados de otros comensales que parecen no recordar la vida con niños pequeños se repetirán a pesar de todo.
Pero puede estar seguro de que, con un poco de preparación previa y algunos trucos bajo la manga, será usted quien se deleite con los cumplidos de los demás comensales.






